Errores más comunes de los emprendedores al iniciar un negocio

Hay ciertas actitudes, en las que todos caemos a la hora de emprender, que lejos de ayudarnos a conseguir que nuestro negocio funcione, nos alejan cientos de kilómetros de conseguirlo. Son errores que cometemos en la forma en la que hacemos o afrontamos ciertas tareas y responsabilidades, y lo hacemos prácticamente a diario.

La buena noticia es que, al tratarse precisamente de algo que depende sólo de ti cambiar, hoy mismo puedes empezar a dejar de sabotear tu proyecto.

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Errores al iniciar un negocio:

  • Confundir Idea con Mercado
  • Ignorar lo que quieres.
  • Caer en el perfeccionismo
  • Escudarse en el “yo de esto no sé”
  • Descuidar los agujeros negros
  • Sufrir la avalancha de tareas

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Errores que vas a dejar de cometer desde hoy para que tu negocio crezca:

Confundir Idea con Mercado

Los emprendedores solemos ser bastante apasionados, y esa es una virtud que debes cultivar, porque te dará la fuerza que necesitas para sacar tu proyecto adelante. Sin embargo, en ocasiones, también puede jugar en nuestra contra, cuando nos dejamos llevar más por el instinto que por la validación.

Cuando tienes una idea original, y sientes que ahí hay un negocio, es tentador preguntar a los que te rodean qué les parece. Pero tus familiares y amigos te van a mentir con tal de verte sonreír. ¡Su aprobación de tu idea no significa que haya un mercado real dispuesto a pagar por ella!

Antes de poner toda la carne en el asador, debes asegurarte de que tu idea satisface una necesidad real de la gente, y que además, ¡están dispuestos a pagar por ello!

No te líes, en un negocio, lo que importa es VENDER. Así que, antes de tener siquiera un logo, ofrece de verdad lo que vendes a personas que creas que de realmente puedan estar interesadas en comprar, aunque aún no tengas una web que enseñarles. Si tu idea les interesa tendrás el feedback que necesitas para poner todo lo demás en marcha.

[bctt tweet=»No seas insensato y valida tu modelo de negocio antes de lanzarte a la piscina» username=»LuciaHorvilleur»]

[dt_quote type=»blockquote» font_size=»big» animation=»none» background=»plain»]No te pierdas el vídeo de mi charla sobre «Cómo validar tu idea de negocio»[/dt_quote]

 

¿Qué es lo que quieres?

Saber lo que quieres cuando emprendes puede ser terriblemente complicado, pero es esencial para el éxito de tu proyecto, porque, ¿si no sabes a dónde vas, cómo vas a llegar?

Además si no tienes objetivos definidos, no podrás enfocarte, establecer prioridades, ni centrarte en lo que de verdad importa. Y de todo ese follón que se monta en tu cabeza cuando vas sin rumbo, se alimentan el estrés y la ansiedad. Así que, si no quieres volverte loco, obliga a tu mente a concentrarse en lo que tú quieres.

Si te interesa profundizar en cómo establecer objetivos, te recomiendo que te apuntes a mi curso GRATIS «Mamá, quiero ser empresario» en el que trabajamos con ejercicios prácticos este tema, para que tomes las riendas de tu negocio.

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No caigas en el perfeccionismo

Cuando trabajas en tu propio proyecto, te juegas mucho, y por eso quieres que sea perfecto, lo sé. Pero, a veces, los emprendedores nos paralizamos por culpa del perfeccionismo, y si hay algo que no te puedes permitir es precisamente eso, no tirar para adelante como sea.

Para evitar caer en el perfeccionismo puedes utilizar 3 trucos:

  1. El poder de un mantra. Cada vez que intuyas que el perfeccionismo te está impidiendo terminar una tarea repítete: “Es mejor para mi negocio lo imperfecto pero hecho, que lo perfecto en mi cabeza” Y dale al botón de enviar el mail, porque ya lo has releído 3 veces y sabes que está bien, o publica el post, o haz esa llamada.
  2. El cambio de chip: terminar. Cuando emprendes las cosas que hacer surgen como las setas, y es fácil dejarse atrapar en la inercia de centrarse en abrir nuevos frentes todos los días. Pero esta forma de organizar el trabajo es poco eficaz, porque tu negocio lo que necesita es que vayas cerrando cosas, y tu mente sentir que vas avanzando. Por eso, debes cambiar el enfoque respecto a tu lista de tareas. ¡Céntrate en terminar!
  3. El control del tiempo. Para enfocarse en terminar ayuda mucho el utilizar fechas y tiempos límite. Pon fecha inamovible a ciertas tareas que deben estar acabadas en esa fecha concreta. Además, concédete un tiempo limitado para ejecutar las tareas (por ejemplo, 20 minutos para redactar el contenido de un correo electrónico), y oblígate a acabarlas en ese tiempo.

[bctt tweet=»¡Huye del perfeccionismo! Cuando emprendes no te puedes permitir bloquearte y no tirar para adelante. » username=»LuciaHorvilleur»]

 

Yo de esto no sé…

De repente tienes una idea, y montas un negocio. Pero a medida que vas caminando te das cuenta de que necesitas conocer un montón de cosas de las que sabes lo justo: ventas, marketing, gestión… No te queda otra que rendirte, o aprender. Tienes que ser honesto y decir, vale, aquí están todas las cosas de las que no tengo ni idea, pero que son importantes para que este proyecto salga adelante

“Yo de esto no sé” es una excusa que oigo a menudo cuando pregunto a los emprendedores si llevan un control de su analítica, por ejemplo. No estamos hablando de física avanzada. Incluso si pagas para que alguien lleve el seo de tu web, eres tú quien debe revisar los resultados mes a mes. ¡Lo mismo con los resultados contables, y con los de todas las acciones que pones en marcha!

Entender y controlar son elementos clave de cualquier negocio de éxito, y si tienes uno, es tu responsabilidad aprender, aunque sea a un nivel básico, todas las áreas de tu empresa, incluso las que no te gustan, o tienes la sensación de que jamás las entenderás.

 

Deja de perder tiempo y dinero por no controlarlos

Uno de mis clientes tardó varios meses en descubrir que su tienda física, que por cierto le traía grandes quebraderos de cabeza, perdía dinero. La tienda online iba lo suficientemente bien como para que la empresa diera un saldo positivo a final de mes. Pero en cuanto volcamos los resultados por separado en una sencilla hoja de excel y la  brecha entre ambos canales de ventas se hizo evidente, puedes imaginar la decisión que tomamos, ¿verdad? Cerrar la tienda física de forma inminente.

Es fundamental que revises tus costes y tus beneficios, en detalle.

También tu tiempo debes analizarlo en detalle. Quizás tengas un cliente que consume un porcentaje inmenso de tu tiempo y te genera muy poco beneficio, o quizás haya algún otro ladrón de tiempo (como el correo electrónico, o la gestión de las redes sociales) que esté mermando tu capacidad de ser más rentable.

Si no controlas tus agujeros negros estarás perdiendo energía, tiempo y dinero.

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Saca las tareas de tu cabeza

Una de las peores sensaciones que tenemos los emprendedores es la de ir todo el día corriendo con la lengua fuera porque no llegamos, y al final del día la lista de cosas que hacer, en lugar de haber disminuido, ha crecido.

Lo primero que debes hacer para combatir la ansiedad que esta situación genera es sacar los “to do” de tu cabeza. Debes encontrar un sistema que te funcione: una hoja de papel, una app, lo que a ti te vaya mejor, y acostúmbrate a volcarlo TODO ahí para dar espacio a tu cerebro.

El siguiente truco para sacarte tareas de encima es hacer una cosa, y luego otra. ¡Una cosa solo! El multitask no funciona, la única forma de sacar adelante el millón de cosas que tienes que hacer es centrándote en resolver una tarea después de otra.

Por último: ¡controla tu tiempo! Saber cuánto tardas de verdad en hacer las cosas es esencial para que pongas los pies en la tierra y no te sobrecargues, ni te frustres con la cantidad de cosas que no te ha dado tiempo a acabar hoy. También así descubrirás en qué cosas eres o no eficiente y cómo mejorar.

 

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CONSEJO:

En los cuadernos de ejercicios del curso «Mamá, quiero ser empresario» también encontrarás ejercicios prácticos que te ayudarán, en pocos minutos a organizar tu tiempo y tus tareas de forma mucho más eficiente. ¡Apúntate ahora, es gratis! 😉

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Ponte en marcha, y deja de sabotear tu proyecto ahora. No olvides contarme qué tal te ha ido con los pequeños cambios que te he propuesto . Y si has caído en alguno de estos errores mientras ponías en marcha tu proyecto, cuéntanos cómo te diste cuenta y los solucionaste en los comentarios de este post 👇

Lucía Horvilleur

 

 

 

 

 

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