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Tu perfeccionismo está limitando el éxito de tu negocio. Páralo YA
Qué le vamos a hacer, me gustan las cosas “bien hechas”. “Bien hechas” hasta el punto de que no pueda quedar un “pero” que ponerle… Y aunque yo pensaba que esto era una virtud, resulta que el perfeccionismo es uno de tus peores enemigos cuando emprendes. Porque ser perfeccionista puede hacer que tu negocio se vaya al carajo.
He de confesar que siempre he sido un bastante exigente, especialmente conmigo misma. Y aunque ser así me ha regalado grandes premios, también ha hecho que me sienta muy frustrada. A lo largo de los últimos años de emprendimiento el perfeccionismo no sólo me ha producido mucha ansiedad, si no que también consiguió dejarme agotada.
Fue entonces, cuando entendí que toda esa presión que sentía por ser mejor siempre, y lograr que todo lo que hiciera fuera “perfecto”, era algo que yo solita había instalado en mi cabeza. Nadie fuera de ella me pedía que llevara todo al límite de la perfección.
[bctt tweet=»Cuando eres perfeccionista, no ves realmente las cosas ‘como son’, si no ‘cómo tendrían que ser'» username=»LuciaHorvilleur»]
Resulta que cuando eres perfeccionista, no ves realmente las cosas como son, si no cómo tendrían que ser. Es como si estuvieras siempre con una lupa mirando para encontrar lo que falla, lo que no es como debería ser según tú. Y la imagen de verte así, buscando de forma insaciable lo que falla en lugar de disfrutar de las cosas tal y como son, no sé a ti, pero a mí me produce una sensación muy desagradable. Y es que, ser perfeccionista es una lucha agotadora contra la realidad.
Detrás de tu perfeccionismo, probablemente se esconden algunos de tus miedos
Probablemente el perfeccionismo está escondiendo alguno de tus miedos más profundos. Identificar cuál es puede ayudarte a entender por qué lo haces y cómo ponerle remedio. Algunos de los miedos más comunes que esconde el perfeccionismo son:
- Sientes que no eres suficientemente bueno, que hay gente mucho mejor que tú haciendo lo que haces
- Crees que no sabes aún suficiente, y que necesitas seguir investigando ad eternum.
- Temes que te juzguen, te aterra hacer el ridículo
- Odias equivocarte y lo evitas a toda costa
Los riesgos de caer en el perfeccionismo cuando emprendes:
Cuando trabajas en tu propio proyecto, te juegas mucho, y por eso quieres que sea excelente, lo sé. Pero, a veces, los emprendedores nos paralizamos por culpa del perfeccionismo, y si hay algo que no te puedes permitir es precisamente eso, no tirar para adelante como sea.
Además de la parálisis hay otras consecuencias cuando tiendes al perfeccionismo como que te sientas constantemente frustrado por la falta de tiempo, que estés insatisfecho con el resultado de lo que haces, que empieces muchas cosas que acabas por no lanzar porque no son como tu querrías, o que tu productividad sea muy baja porque dediques más tiempo del que deberías a cada tarea.
¡No te líes! En un negocio, lo que importa es que aportes valor, y eso es lo que debe obsesionarte, no el repasar mil veces las cosas para ver qué falla. Tienes intentar rebajar tu exigencia y conectar con las necesidades reales de tus clientes para ajustar tu concepto de excelencia.
Cómo poner remedio al perfeccionismo para permitir que tu negocio crezca:
Estas son las técnicas que me han ayudado a vencer al perfeccionismo y lograr que mi empresa crezca más rápidamente:[/vc_column_text][info_list font_size_icon=»24″ eg_br_style=»none»][info_list_item list_title=»Recuerda que es mejor correcto pero hecho que perfecto en tu cabeza» list_icon=»Defaults-bolt flash» title_font_size=»desktop:20px;» title_font_line_height=»desktop:36px;» desc_font_size=»desktop:16px;» desc_font_line_height=»desktop:20px;»]Cada vez que intuyas que el perfeccionismo te está impidiendo terminar una tarea repítete:
“Es mejor para mi negocio lo imperfecto pero hecho, que lo perfecto en mi cabeza”
Y dale al botón de enviar el mail, porque ya lo has releído 3 veces y sabes que está bien, o publica el post, o haz esa llamada.[/info_list_item][info_list_item list_title=»Céntrate en terminar» list_icon=»Defaults-bolt flash» title_font_size=»desktop:20px;» title_font_line_height=»desktop:36px;» desc_font_size=»desktop:16px;» desc_font_line_height=»desktop:20px;»]Cuando emprendes las cosas que hacer surgen como las setas, y es fácil dejarse atrapar en la inercia de centrarse en abrir nuevos frentes todos los días.
Pero esta forma de organizar el trabajo es poco eficaz, porque tu negocio lo que necesita es que vayas cerrando cosas, y tu mente sentir que vas avanzando.
Por eso, debes cambiar el enfoque respecto a tu lista de tareas. ¡Céntrate en terminar![/info_list_item][info_list_item list_title=»Utiliza fechas y tiempos límite» list_icon=»Defaults-bolt flash» title_font_size=»desktop:20px;» title_font_line_height=»desktop:36px;» desc_font_size=»desktop:16px;» desc_font_line_height=»desktop:20px;»]Para enfocarse en terminar es muy útil utilizar fechas y tiempos límite.
Pon fecha inamovible a ciertas tareas que deben estar acabadas en esa fecha concreta.
Además, concédete un tiempo limitado para ejecutar las tareas (por ejemplo, 20 minutos para redactar el contenido de un correo electrónico), y oblígate a acabarlas en ese tiempo.[/info_list_item][/info_list][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]Trabajar de forma consciente en rebajar mi perfeccionismo me ha ayudado a trabajar más tranquila, ser más eficiente, y conseguir mejores resultados en mi empresa. Y tú, ¿también combates el perfeccionismo? Si tienes algún truco que te haya ayudado ¡me encantaría conocerlo!, por favor, compártelo en los comentarios de este post 👇.
Un abrazo!
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