Recientemente, tuve una conversación que me hizo reflexionar profundamente. Durante una cena en casa con Teo, el hijo de Víctor, surgió una historia que resonó en mí y que quiero compartir contigo. Teo forma parte de un equipo de fútbol federado, donde la competencia y la seriedad son la norma. En esta ocasión, el club sorprendió a todos al comunicar que no contaría con uno de los porteros más talentosos para la próxima temporada, habían decidido dejarlo ir a pesar de su habilidad y actitud impecable, 

Aunque probablemente existen circunstancias externas que influyeron en esta decisión, toda la situación se convirtió en un claro ejemplo de vida: puedes dar lo mejor de ti y algunas veces las cosas no saldrán como esperas. Esta anécdota me llevó a reflexionar sobre algo crucial en la vida: las circunstancias a veces nos desafían, y es nuestra actitud la que marca la diferencia. 

Este es un tema del que habla Víctor Küppers en su charla, que te recomiendo escuchar y puedes acceder haciendo clic en el reproductor de audio para acceder al episodio de FocusPreneur.

La fórmula del valor personal

En su charla, Víctor Küppers introduce una fórmula que calcula el valor personal: (C + H) x A. Donde C representa conocimientos, H se refiere a habilidades y A, la actitud. La clave aquí está en que C y H suman, pero A multiplica. ¿Qué quiere decir esto? Que tu actitud amplifica y potencia tus conocimientos y habilidades. 

Actitud: el motor del éxito empresarial

Cuando hablo con emprendedores, puedo percibir rápidamente quiénes están en el camino adecuado. No se trata de ser vidente, sino de comprender que la actitud es el motor que impulsa cada paso en la dirección correcta. ¿Te has preguntado por qué algunos emprendedores tienen un negocio próspero mientras que otros luchan por mantenerse a flote? La respuesta está en la actitud.

Imagina tener dos opciones: tratar con alguien que se queja constantemente y se muestra negativo, o interactuar con alguien lleno de energía, compromiso y actitud positiva. ¿A quién elegirías? Tus clientes también eligen. Una actitud positiva no solo influye en tu relación con ellos, sino que se refleja en cada aspecto de tu negocio.

El desafío de ser el líder de tu propio éxito

Por lo general, los emprendedores tenemos una personalidad con actitud, sin embargo, en ocasiones, nos desviamos y nos enfrascamos en tareas que no contribuyen al crecimiento. Si estás comprometido a avanzar en tu emprendimiento con resultados tangibles, te invito a acceder a la Brújula FocusPreneur, una herramienta gratuita diseñada para ayudarte a identificar las necesidades específicas de tu negocio en cada etapa y así poder tomar decisiones con confianza.

Recuerda: actitud en cada paso

No subestimes el poder de la actitud. Tu mentalidad impacta directamente en tus resultados, así que enfrenta tus tareas y responsabilidades con actitud positiva en mayúsculas y convierte tu actitud en tu mayor activo en el mundo de los negocios, solo así podrás experimentar cómo tu perspectiva influye en tus logros.

Si deseas profundizar en este tema, te invito a hacer clic en el reproductor de audio para acceder al episodio de FocusPreneur. Encontrarás valiosas ideas y perspectivas que te ayudarán a mantener una actitud positiva y enfocada en tus objetivos.

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